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El Escuadrón Aeromóvil II "La Marinette" el 1 de Mayo de 1982

En la madrugada del 1 de mayo Puerto Argentino recibió ataques realizados por un Vulcan de la RAF y una incursión a baja altura por aviones Harrier. La primera dañó la pista de aterrizaje y la segunda produjo daños materiales en las instalaciones del aeropuerto. La intensidad de las defensas hizo que los ataques de Harriers a ras del suelo sólo se llevaran a cabo solamente una vez más.

La FAA respondió con numerosas misiones de cobertura aérea que incluyeron un par de salidas de A-4C armados con misiles Shafrir. A las 9:40 horas el comandante de la Task Force intimó a rendirse a las tropas argentinas. Luego de varios amagues y engaños con helicópteros y buques que hacían creer que se estaba desarrollando un helidesembarco, a las 14:25 tres buques de guerra británicos, que desde mediodía habían sido detectados por un puesto ROA (Red de Observadores del Aire de la Fuerza Aérea, en la cual colaboraban civiles y miembros de otras armas) acercándose a Puerto Argentino, comenzaron un trabajo de "ablandamiento" de las posiciones argentinas por medio de artillería naval. Reglando el tiro se encontraba un helicóptero con el cual intentaban acertar a la pista. Ante la presencia de más helicópteros, la FAA decidió lanzar una serie de misiones con el fin de repeler la acción del enemigo. La primera sección despegó a las 15:23 hs. y tenía como objetivo realizar cobertura aérea de los aviones que realizarían el ataque a los buques.

Dentro de estas escuadrillas de aviones, nos centraremos en dos secciones de Mirage 5 Dagger: los Tornos y Fortines. Los primeros iban armados con 2 bombas colocadas en estaciones ubicadas en la parte posterior del fuselaje y 3 tanques de combustible de 1300 lts lo que les daba una autonomía de no más de 2 minutos en la zona del blanco. Se trataba del Capitán Dimeglio en el C-432, el teniente Aguirre Faget en el C-412 y el primer teniente Román en el C-407. Los Fortines llevaban tanques de combustible externos y 2 misiles Shafrir. Los pilotos de esta sección eran el Capitán Donadille en el C-403 y el primer teniente Senn. La base de asiento de los 5 aviones era San Julián, donde se encontraba el Escuadrón Aeromóvil II "La Marinette".

Los Tornos, luego de despegar a las 15:45, comenzarían su descenso 40 minutos después de dejar el continente y a 200 kilómetros de las islas. Pero cerca de las islas Salvajes, el radar de Puerto Argentino les advirtió que una PAC se dirigía a ellos y sacando frenos de aire, y debido a que los aviones estaban pesados perdieron altura rápidamente hasta perderse debajo del lóbulo del radar enemigo. Según les había sido informado en su Orden Fragmentaria 1105, los buques que cañoneaban Puerto Argentino estaban en la Bahía de la Anunciación. Siempre rasantes, pasaron por la boca Norte del Estrecho de San Carlos y al llegar al cabo Corrientes viraron hacia el Sur en búsqueda de la Bahía y sus blancos. El mar estaba calmo y el techo de nubes era de 150 a 300 metros. Ya acercándose a la zona, el numeral 2 pudo ver fugazmente a un Harrier que subía y se perdía en las nubes. Se trataba de uno de los aviones que había combatido contra la sección Dardo de Mirage IIIEA. El numeral de la misma había sido derribado sobre la Isla Borbón, y el avión que vieron los Tornos cerca de Puerto Argentino era piloteado por el TC (RN) Robert Thomas. El Capitán García Cuerva, contra el que había combatido Thomas, fue pocos minutos después derribado por la AA propia de Puerto Argentino al tratar de aterrizar en Puerto Argentino su avión, el cual se encontraba en perfecto estado (si hubiese estado dañado como sostienen las fuentes inglesas, G. Cuerva se podría haber eyectado y salvado su vida, en vez de arriesgar su vida para salvar el avión).
Otro piloto que ofrendó su vida y que distrajo a una PAC de Harriers fue el primer teniente Ardiles, quien fue derribado en un combate desigual, peleando solo contra dos aviones. Minutos antes, atacando sólo con sus cañones de 30 mm, había forzado a dos buques ingleses a desistir en su intento de ingresar al estrecho de San Carlos por el Sur.

Estos 4 Harriers tal vez podrían haber interferido con la misión de los Tornos...

Volviendo a los 3 Dagger que volaban a 800 km por hora a pocos metros del agua, luego de ver al inglés subiendo, se pegaron más al mar y aceleraron. Iban saltando los islotes que se les cruzaban. Pronto llegaron a la Bahía de la Anunciación y la encontraron vacía. Un rápido vistazo al liquidómetro le permitió a Dimeglio tomar la decisión de continuar hacia el Sur por un minuto más antes de emprender el retorno a su base en el continente. Los aviones estaban en una misma línea, uno al lado del otro y con 50 metros de distancia entre ellos.

Mientras, a 30.000 pies de altura....

...Se encontraban los Fortines sobre el Estrecho de San Carlos, orbitando a la espera de que los Tornos cumplieran su misión. Mutuamente Donadille y Senn cubrían la cola de sus aviones en suaves virajes. Por un problema eléctrico, los cañones de 30 mm del avión de Donadille no funcionaban. Esto lo pudieron verificar cuando hicieron la prueba de disparo en camino a las islas. Sin embargo, el numeral 1 decidió seguir adelante con sólo sus Shafrir como armamento efectivo.
En la frecuencia de radio escucharon las comunicaciones de García Cuerva con la torre de Puerto Argentino...cómo a pesar de la coordinación efectuada y los gritos desesperados, los nerviosos artilleros argentinos comenzaron a disparar sobre el Mirage III cuando limpiaba su avión para el aterrizaje...tal vez confundiendo las cargas externas con bombas y al Mirage con un Harrier. Conmovidos por las últimas palabras de García Cuerva, los Fortines siguieron su misión. El Mirage III mientras tanto, caía incendiado en el mar cerca de Puerto Argentino, y con él, su valiente piloto.

16:35 hs, a 50 pies de altura, cerca de Puerto Argentino

Luego de llevar a su sección hacia el sur dando un rodeo para no acercarse a las excitadas defensas de argentinas el numeral 3, quien volaba a la derecha de la formación, vio explosiones sobre el mar que al principio le hicieron pensar en fuegos artificiales. Comprendió que se trataba de sus blancos, los buques, y las explosiones eran los disparos de los cañones que usaban para bombardear la pista de la BAM Malvinas. Informó a Dimeglio por radio, quien ordenó que cada uno atacara al buque que tenía adelante. Los buques británicos estaban navegando en un gran círculo a 8 km al SE de la Base Aérea Militar Malvinas, uno detrás del otro, mientras cañoneaban tranquilamente Puerto Argentino. 9 km al Norte se acercaban los Dagger...40 segundos al blanco. Cuando fueron enfrentados por los argentinos, el destructor quedó a la izquierda (blanco de Aguirre Faguet), una de las fragatas clase 21 en el centro (la de Dimeglio) y la otra 21 a la derecha (la de Román).
Bien planchados sobre el mar, a no más de 4 metros de las olas, los MV aceleraron al máximo y se acercaron a los buques. El líder, Dimeglio, atacó al buque asignado a Aguirre Faguet, porque le quedaba más cómodo para el tiro y le resultaba, por tanto, más tentador.
Cuando estaban cerca de los británicos, los pilotos comenzaron a tirar con los cañones, salvo Román que estaba muy concentrado en la puntería con las bombas. El numeral 1 y 2 le entraron al D-42 desde la popa. Luego de disparar sus cañones y bombas, Dimeglio invirtió el avión y puso las alas perpendiculares al mar. Así pasó entre las antenas del Destructor, 1 segundo después de lanzar las BRP y a continuación viró hacia la derecha y se encontró cruzando al buque que era su objetivo original y al cual no había atacado. Sólo le quedaban algunas municiones de cañón de 30 mm, y las utilizó en este buque. Siguiendo al frente, también pasó lo más cerca que pudo de la proba del buque atacado por Román, para dificultarle el tiro. Finalmente, alivianado y a máxima velocidad, llegó a tierra y luego de volar a baja altura durante algunos kilómetros, trepó hacia las nubes.
Román viró también a la derecha luego de soltar sus bombas, llegando a la costa de las islas y ya con rumbo al continente. Ni él ni Dimeglio pudieron ver el efecto de sus bombas ya que el retardo en la caída provocado por los paracaídas hizo que pronto las dejaran atrás. Pero Román sí pudo ver lo que sucedió con las de Aguirre Faguet, quien se encontraba adelante y a la izquierda.
Aguirre Faguet tuvo la idea de elevarse para poder hacer mejor puntería. Subió a casi 1000 metros. Desde tierra se vió cómo, aprovechando la oportunidad que les daba el piloto, los buques le "tiraron con todo". Un misil Sea Cat lanzado por la fragata atacada por Dimeglio pasó por debajo del Dagger del numeral 2, quien concentrado en la puntería no lo vió venir ni se enteró de su presencia hasta varias horas después cuando se lo contaron...
Aguirre lanzó sus bombas en picada sobre el destructor y luego se pegó al mar, saliendo del ataque en dirección a mar abierto, es decir, hacia su izquierda. Román observó instantes antes de su ataque la explosión con humo y llamas de las bombas del numeral 2 al hacer impacto cerca del destructor. Esto mismo lo vieron los numerosos observadores desde tierra.
Se comunicaron las novedades al salir del blanco: "uno saliendo, dos saliendo, tres saliendo". Todos volvían, increíblemente, sin haber recibido un solo impacto.

En los buques

La aparición de los aviones argentinos los tomó casi por sorpresa. De hecho, el fuego de defensa no empezó hasta casi el último momento. La fragata del centro pudo disparar su Sea Cat gracias a la "levantada" de Aguirre Faguet, pero no hizo blanco. El fuego con armas de distinto calibre fue intenso.
La fragata Arrow recibió numerosos impactos de 30 mm, y el destructor, el impacto de las bombas de Aguirre. Escorado y con fuego a bordo, recibió al principio la ayuda de una de las fragatas que se le acercó. Luego se alejó de las islas lentamente, siendo dejado atrás por las dos fragatas que escapaban raudamente. El fuego fue combatido incesantemente y el buque, cubierto de humo, pronto se perdió en el horizonte. Un mensaje interceptado por las fuerzas argentinas, emitido por un Destructor tipo 42 a las 17:10 hs, solicitaba ayuda al HMS Invencible.

En tierra

Los testigos en tierra vieron con asombro cómo los Dagger pasaban sin ser tocados sobre los buques, después de atravesar el cono de trazadoras de antiaérea.
Personal del ROA y la Armada vieron como, luego del pasaje de los aviones sobre el buque "grande", se produjo en éste un fogonazo y se comenzó a cubrir con humo blanco, que con el tiempo se tornó en negro.
Numerosos fueron los testigos (miembros del ROA, el Ten. Jorge Reyes y el Mayor Hugo A. Maiorano, jefes de artillería antiaérea de BAM Malvinas y oficiales de la Armada como el Teniente de navío Rodolfo Cionchi quien presenció el ataque desde Sapper Hill) que dan crédito a la versión de la FAA según la cual se trató de un destructor clase 42 (tipo Sheffield) y no del HMS Glamorgan, el cual aseguran los ingleses escapó con daños menores al ataque. Los rasgos distintivos eran los radomos del radar tipo 909 y la gran antena cuadrada. Por otra parte, es importante recordar que la Armada Argentina tiene destructores D-42, con lo que el reconocimiento no deja dudas. El mismo Dimeglio ha estado a bordo de los clase Sheffield (Hércules y Santísima Trinidad) de nuestro país, con lo que su perfil le resulta inconfundible.

Un observador "no invitado"

Volando al sur de las islas, y luego de su ataque (por error a un buque logístico propio), el líder de los A-4B indicativo Trueno, el Capitán Carballo, decidió retornar al continente haciendo un rodeo hacia el norte, pasando cerca de Puerto Argentino. Cerca del mismo se encontró con lo que describió como una fragata cubierto de humo. Esto hizo que cambiara de opinión y volviera al continente por la ruta sur de las islas. Aunque no pudo realizar una buena observación debido a la poca luz que había a esa hora y al humo que despedía el navío, no se puede dudar de que se trataba del D-42 atacado frente a Puerto Argentino por los Tornos.

Una vuelta "movidita"

Ya pensando en el regreso al continente, los tres Tornos tomaron altura para economizar combustible y así poder llegar al Continente. Cuando estaban a unos 6000 metros, todavía sin haber llegado a la mitad de la isla Soledad, el CIC de Puerto Argentino les informó que tenían una PAC de Harriers en su persecución a 15 kilómetros de distancia. El líder ordenó descender raudamente para escapar de la detección del controlador inglés, pero el numeral 3 no lo escuchó. De hecho, al ver a sus dos compañeros hundirse nuevamente en las nubes, les avisó que acaba de ver a dos Harrier yendo hacia abajo. Tranquilamente, siguió su "económica" marcha a 10.000 metros.
El Torno 1 y 2 salieron debajo de las nubes...entre dos cadenas montañosas. Sólo Dios los salvó de estrellarse contra los cerros. Se trataba de las Alturas Rivadavia y del Monte Simón. Siguieron volando supersónico hacia el oeste pegados a la tierra, mientras el consumo elevado ponía en peligro su retorno a su base. Llegando al Estrecho de San Carlos, Dimeglio decidió subir a una altitud que les permitiera reducir el consumo de "jugo", ya que consideraba que era imposible que todavía los estuvieran siguiendo. Es así que se elevó hasta unos 14.000 metros, mientras que el Torno 2 se quedó a 7.000 mts.
Ahora otra PAC se acercó al Torno 2. Sus compañeros escuchaban en la radio cómo el radar de Puerto Argentino les informaba que los Harrier comían la distancia que los separaba de él, pero Aguirre Faguet seguía con problemas en su equipo y no sabía de del peligro que lo acechaba.
Paralelamente, los Buitres, otra sección de Mirage, atraía y arrastraba hacia el continente a otra PAC inglesa.

Carrera contra el tiempo...

En una situación crítica como esta, finalmente el CIC decidió enviar a los Fortines a cubrir al avión que se encontraba en peligro. Dejando el círculo en el que volaban, Donadille y su numeral aceleraron a supersónico con postcombustión luego de desprenderse de sus tanques de combustible externos.
El radar les informaba constantemente la distancia entre ellos y la PAC, y entre la PAC y Aguirre Faguet. Los Harrier estaban a 7 kilómetros del Torno 2.
Cuando los ingleses se encontraban a 3 millas de su blanco, los Fortines ya estaban colocados a 2 millas detrás de los SHAR. Pero el rumbo en el que se producía la persecución (320 º) hacía que los misiles de los argentinos se engancharan en el sol. Y Donadille no podía contar con sus cañones. Como armamento efectivo sólo contaban con la munición de 30 mm de Senn.
Con la visión afectada por tener el sol de frente, y volando más rápido que los ingleses, la preocupación de los pilotos de Dagger era superar a los Harrier y quedar delante de ellos, pasando de cazadores a cazados.
Cuando la distancia entre la PAC y los Fortines era de 1,5 milla y todo hacía suponer que el desenlace de esta persecución sería trágico, los pilotos ingleses, advertidos seguramente por su controlador ubicado en un buque, decidieron poner fin a la persecución del Torno 2. Los cazas argentinos estaban demasiado cerca de su cola y los alcanzarían antes que ellos dieran alcance a su víctima. Con un brusco viraje, la PAC descendió perdiendo altura rápidamente. Si los Fortines hubiesen tardado unos segundos más, posiblemente Aguirre Faguet hubiese sido derribado. Fueron unos largos 150 kilómetros de persecución.

El regreso de los guerreros

Ahora sí, sin peligros que los acecharan, los 5 Daggers se pudieron concentrar en su retorno a San Julián. Los aviones no tenían equipo de navegación, así que lo único que podían hacer los pilotos era poner rumbo hacia el continente y estimar su distancia en base al tiempo transcurrido. Cuidando el combustible al máximo y descartando los tanques externos que les quedaban, llegaron con el "jugo" justo para aterrizar. Aterrizaron primero los Tornos 1 y 2, que tenían menos combustible por su vuelo rasante sobre la isla Soledad, luego el Torno 3 y finalmente los Fortines.
La gran alegría luego de haber cumplido sus misiones y haber regresado sin un rasguño fue empañada por el conocimiento de la pérdida de los primeros compañeros de Mirage: García Cuerva y Ardiles.
El primer ataque a las "invencibles" formaciones navales británicas, según se creía universalmente, había sido concretado con éxito, cayendo con ellas un mito.

Puerto Argentino, luego del ataque

Las dos fragatas se alejaron con rumbo sudeste. Más despacio, escorado y emitiendo humo desde la proa, el destructor les seguía los pasos. Según el Alte. Woodward, lo que se veía desde tierra puede haber sido el humo del disparo de los cañones durante el ataque (en lugar de la explosión de las bombas) o el producido por las turbinas del buque (cuando dejaba el escenario). Cuando se perdió en el horizonte, todavía se veía la columna de humo.
Alrededor de las 18:30 horas, ya de noche, los mismos testigos que habían presenciado el combate desde tierra y observadores ubicados en el monte Low, al norte de Puerto Argentino, escucharon una serie de explosiones en la dirección en la que se alejaron los buques. En principio se creyó que se trataba de un combate naval. El horizonte se iluminó con sucesivos relámpagos. Hacia las 23:00 hs, la iluminación del horizonte y las explosiones cesaron.

Consideraciones finales, 21 años después

La Fuerza Aérea sostiene que se trataba de dos fragatas clase 21 y un destructor tipo 42. Lamentablemente, las cine-ametralladoras de los 3 Dagger fallaron y no se pudo filmar los blancos atacados.

Existen tres teorías con respecto al resultado del ataque:

A) que se trataba del HMS Exeter, el cual volvió a aparecer luego de realizarle reparaciones fuera del teatro de operaciones, para derribar el LearJet T-24 del Escuadrón Fénix el 7 de junio o
B) que las bombas de Aguirre Faguet impactaron en el HMS Sheffield, el cual dañado e imposibilitado de defenderse, fue blanco del Exocet de los SUE el 4 de mayo o
C) que el Sheffield se hundió el 1 de mayo a la noche y provocó como resupuesta el hundimiento del crucero ARA General Belgrano al día siguiente (junto con la necesidad de hacer caer el plan de paz del Presidente de Perú que ya había sido aceptado por Estados Unidos y Argentina: la única manera de hacerlo era asestar un golpe brutal a los argentinos, luego del cual no tendrían más remedio que seguir en la guerra).

Según fuentes oficiales británicas, los buques que cañoneaban Puerto Argentino eran el destructor clase County Glamorgan (que el 13 de junio a la noche fue impactado por un Exocet disparado desde tierra y dejado fuera de combate) y las fragatas Arrow y Alacrity. Los daños sufridos fueron menores en el Glamorgan, 8 impactos de cañón de 30 mm en la Arrow y un rumbo de agua abierto por una bomba que estalló cerca de la Alacrity y que pudo ser reparado. Asimismo, afirman que los numerosos marineros de los buques atacados sostienen esta versión y que se trata de un error de observación de los argentinos.

Lo sí está fuera de duda es que los ingleses no eran invulnerables, que se podía sobrevivir a su fuego defensivo y se los podía "lastimar". Sólo una vez más intentaron atacar Puerto Argentino de día: el 12 de mayo, cuando el destructor tipo 42 Glasgow fue dejado fuera de combate por los A4-B de la V Brigada Aérea.
El 1 de mayo fue el día partir del cual los miembros de la Task Force estarían atentos a los cielos, deseando que no se produjera otro ataque de la Fuerza Aérea Argentina.

Datos para el modelista

Siendo esta una revista de plastimodelismo, no podemos dejar de brindar la información necesaria a nuestros lectores para reproducir los Dagger de la FAA.
No existe en el mercado ninguna maqueta que reproduzca fielmente un Dagger de la FAA sin que se le tengan que hacer modificaciones importantes. En 1/72 están los kits fabricados en Turquía, pero es necesario hacer varias modificaciones a la nariz del Mirage para que represente fielmente a un Dagger. Para 1/48 se puede usar el kit de Esci, pero hay que agregarle la nariz de resina que se vende en el mercado.

Modificaciones mayores, similares a las que se pueden leer en la nota del Finger > Aquí  son requeridas para el kit de Heller > Aquí

En el caso de los aviones de la FAA, siempre es preciso consultar la foto del avión específico (matrícula) que se quiere representar ya que hay diferencias entre cada uno, aunque los lineamientos generales son más o menos mantenidos.
Los Dagger de la FAA estaban pintados en el esquema SEA (South East Asia) tomado del que usó la USAF durante la guerra de Vietnam. Por lo tanto, los colores eran un tostado claro y dos tonos de verde para el dorso y fuselaje, y blanco para el vientre del avión. La terminación era semi mate. Las líneas de demarcación entre los 4 colores eran suaves. Las que dividían los colores superiores de los inferiores podían ser rectas o levemente onduladas.

La nariz estaba pintada en negro (acá sí la demarcación era precisa), excepto el tubo pitot (sonda) que podía quedar en color metal. Las antenas VHF (2) estaban pintadas según el sector en el que se encontraban (blanca abajo, tostado arriba), aunque hay fotos de Daggers con la antena superior pintada en gris claro.
La cara interna de los conos de toma de aire eran blancos.
Con respecto a la cola, su extremos superior podía estar pintado en gris claro con un borde fino en negro o siguiendo el esquema de camuflaje sin el negro. Lo mismo ocurría con el filete delantero. Las dos pequeñas antenas ubicadas en la parte superior tenían su cara inferior pintada en blanco y la superior en blanco o tostado. La tapa del paracaídas de cola esta plateada o metal natural. A ambos lados de la deriva iban dos escudos: a la izquierda el del Grupo 6 de Caza, y a la derecha el del Grupo Técnico 6. No todos los aviones llevaban los escudos.
Las alas contaban con líneas rojas a lo largo de la raíz, en la zona de unión con los elevones y alrededor de los aerofrenos (formando un triángulo, aproximadamente). 

Las insignias principales eran escarapelas de 60 cm de diámetro en la parte posterior del fuselaje, sobre el semiala izquierda y debajo de la derecha. Una bandera Argentina de 60 x 40 cm se pintaba en la cola, aunque no en todos los aviones se pintó exactamente en el mismo lugar. Por ejemplo, el C-421 tenía su bandera pintada más abajo que otros aviones.
Las palabras Fuerza Aérea Argentina estaban pintadas en negro a ambos lados de la nariz, debajo de la matrícula que generalmente estaba pintada en el color inverso (tostado) al usado en el camuflaje de esa zona (verde). En la tapa superior delantera de la nariz la matrícula se escribía con pintura negra.
La matrícula principal estaba colocada en la zona posterior del fuselaje, entre la escarapela y la tobera. Podía estar pintada en negro mate (en la minoría de los aviones como el C-419 y C-420) o en los colores del camuflaje, invertidos. En la mitad izquierda siempre en color tostado, pero en el derecho, según las ondas del color, podían ser enteramente verde o en parte verde y parte marrón (cuando la matrícula pisaba a ambos colores en esta zona del fuselaje) como en el C-407 y el C-414.
Los tanques de combustible de 1300 litros estaban pintados en verde y tostado en la parte superior y blanco en la inferior. También se usaron tanques sin pintar y a partir del 22 mayo, tanques en esquema desértico (marrón y arena) que fueron comprados en Israel y traídos a través de Perú. Estos traían inscripciones como "Denles duro, ches" y otras alusivas a los británicos.
Durante la guerra algunos aviones fueron bautizados como el C-410 ("Vikingo") y el C-419 ("Boomerang", para que siempre volviera, aunque el Tte. Castillo fue derribado en él por un Sidewinder el 24 de mayo). Estas inscripciones se hicieron en la tapa delantera inferior del tren de nariz.
El 28 de abril, antes del comienzo de las hostilidades, se pintaron bandas amarillas de 1 metro de ancho arriba y debajo de las alas y en el empenaje. Con esto se buscaba facilitar la identificación de los aviones por la artillería antiaérea propia. Los aviones que se encontraban en San Julián en esa fecha eran: C-404, 407, 412, 421, 434, 432. En algunos casos, las bandas tapaban la bandera y en otros fueron pintadas alrededor de las mismas y de los escudos.

Los tanques externos también recibieron una mano de color amarillo en su mitad inferior.
Al 407 y al 434, por haber sido los primeros del Escuadrón en sobrevolar las islas en vuelo de reconocimiento el 16 de abril, se les pintó las islas sobre la toma de aire izquierda, usando pintura amarillo verdosa, con las palabras "Islas Malvinas" debajo.
El 24 de mayo se dio la orden de repintar las bandas, ahora en color verde. La única pintura disponible fue un "verde medio azulado" (turquesa), la cual fue aplicada durante la noche, con gran trabajo, utilizando pinceles. Los aviones disponibles en San Julián ese día eran: C-419, 430, 410, 420, 421, 434, 416, 432 y 411.
Algunos aviones tuvieron las bandas de cola repintadas con soplete en un color tostado claro, aproximadamente FS 33690.
Finalmente, los kill marks aplicados en el costado izquierdo de las narices de los aviones fueron diseñadas por Exequiel Martínez y eran pintadas en blanco, amarillo y a veces con la bandera británica sobre el buque. Cuando se pensaba que el buque sólo había sido dañado y no hundido, se rellenaba sólo la mitad de la silueta. Los primeros en tener estos dibujos fueron los aviones de los Tornos. El C-414 también tenia un kill mark (Plymouth) blanco en la toma de aire izquierda. Lamentablemente, dichas marcas se perdieron cuando los Dagger fueron convertidos a Finger y pintados en gris claro.

Tabla de colores - equivalencias aproximadas

Se deben chequear los colores entre avión y avión, pues el uso y desgaste producía variaciones en los tonos.

Referencias

Revista Modelshow N12 y N13
IPMS Stockholm
Dagger & Finger, Núñez Padín
Dios y los Halcones, Pablo Carballo
Halcones sobre Malvinas, Pablo Carballo
La Guerra Inaudita, Rubén Moro
La Batalla Aérea de nuestras Islas Malvinas, Pío Matassi
Aeroespacio N534
Ellos también combatieron, Guillermo Posadas
La Fuerza Aérea en Malvinas, Tomo I
The Falklands War, Duncan Anderson
Harrier over the Falklands, Nigel Ward
Guerra Aérea en las Malvinas, Benigno Andrada
Reportaje al Vicecomodoro DiMeglio en Canal Marín, Buenos Aires, 2002

Condor Decals provee calcas para aviones que operaron en Malvinas, Argentinos e Ingleses en escala 1/72 y 1/48. > Aquí